1 agosto, 2018
por Alejandro

¿Medicarte por tu cuenta es una mala idea?

pastillas

A veces es complicado enfrentarnos a la costumbre, mirarla de cara a cara y darnos cuenta de que, por mucho que nos insistieran desde pequeños, hay cosas que están mal hechas. Uno de estos casos, y que afecta directamente a la salud, es cuando tenemos el hábito de automedicarnos en cuanto sentimos algún problema, sin consejo médico. Simplemente porque así lo hemos hecho siempre. Simplemente por costumbre.

Según un estudio de la Organización Mundial de la Salud, más de la mitad de los medicamentos que se suelen comprar se utilizan de manera inadecuada. Es decir, tomamos cosas que no necesitamos y que, en el peor de los casos, nos pueden provocar otros problemas. No nos referimos tanto a que, ante una molestia leve y de manera ocasional, como puede ser un dolor de cabeza poco intenso, nos tomemos una Aspirina o cualquier otro analgésico, sino, más bien, al caso de que se consuman de manera muy habitual, o que se usen para tratar de paliar otras dolencias más fuertes o graves.

Mucha gente piensa, de manera errónea, que los medicamentos que no requieren de receta se pueden usar sin perjuicio para nuestra salud, pero esto no es, en absoluto, cierto. Esto es especialmente grave en el caso de los antibióticos, que deberían tomarse siempre bajo prescripción médica. El motivo principal es que una toma incorrecta de estos medicamentos podría producir que tu cuerpo desarrollara una resistencia a ellos, y por lo tanto dejaran de tener efecto. De esta forma, las bacterias con la que aspiran terminar acabarán fortalecidas y será mucho más complicado superar la enfermedad.

pastillas mano automedicarse

Por último, recuerda que el uso de antibióticos no tiene sentido para problemas relacionados con virus o cualquier otra cosa que no tenga que ver con una bacteria. La OMS recomienda que nunca se guarden estos fármacos si sobran una vez terminado el tratamiento, y que nunca se compartan con nadie.

La automedicación como riesgo innecesario

Por otra parte, hay que tener en cuenta multitud de factores cuando intentamos paliar unos síntomas haciendo uso de medicinas por nuestra cuenta. Uno de esos es que no a todas las personas les afecta igual, y a algunas podría traerles consecuencias indeseadas en función de sus propias circunstancias. Un caso claro que ejemplifica uno de estos escenarios sería el de una persona alérgica que sufra una reacción adversa en su cuerpo al tomar un medicamento determinado.

Otro factor importantísimo, es que podríamos ocultar posibles problemas graves, e incluso dificultar la labor del médico a la hora de elaborar un diagnóstico preciso. Es decir, quizá tomamos algo que alivie ciertos dolores, lo cual puede despistar al facultativo y tardar más en encontrar el problema de raíz. Esto es peligro en el caso de enfermedades graves.

hombre preocupado

Además, y ya desde un punto de vista, digamos, de orden doméstico, cabe reflexionar sobre el gasto económico que realizamos a la hora de comprar fármacos que ningún médico nos ha indicado. Ten en cuenta que, aunque quizá no lo creas, muchos de estos son completamente ineficaces para las dolencias por las que solemos automedicarnos. O lo que es lo mismo, estás gastando dinero para algo que no te es de utilidad.

Si eres de los que se automedican, espero que tomes buena nota e intentes controlarte a partir de ahora, de lo contrario puedes poner en riesgo tu salud. Trata de actuar siempre con cabeza y consulta siempre con un médico lo que puedes o no tomar y bajo qué circunstancias.